Una reunión de último momento puso paños fríos a la inminente salida de Luis Miguel Rodríguez de Colón, quien este jueves se presentó a la práctica y realizó trabajos diferenciados.

El convite que definió la situación del tucumano tuvo lugar ayer y reunió al propio jugador, a la Comisión Directiva de la institución sabalera y a integrantes de Futbolistas Agremiados, entre ellos al presidente de la Asociación del Fútbol Argentino, Claudio ‘Chiqui’ Tapia.

Y si bien no trascendió el contenido de la charla, lo cierto es que tanto Tapia como José Vignatti habrían logrado convencer al Pulga para que termine su contrato con Colón, vigente hasta diciembre de 2023.

El 10 sabalero había pedido su salida tras los violentos episodios que vivieron en la sede deportiva del club, cuando barrabravas irrumpieron en una práctica y tuvieron un cruce con varios referentes del plantel de primera división.

Aquel hecho abrió una instancia judicial que involucra a dos exdirectivos de la institución y qye generó un malestar en el ámbito deportivo del que aún se sufren los coletazos.

Filtran detalles del apriete a jugadores y del vínculo dirigencia-barras