Tras lograr la Copa del Mundo, Lionel Messi casi no tiene objetivos para alcanzar dentro del fútbol profesional. Sin embargo, sigue buscando cerrar algunas cuentas pendientes.

Este lunes, en el amistoso ante Dallas FC, el rosarino estuvo a punto de romper otro récord de sus estadísticas personales y conseguir su primer gol olímpico, única definición que le falta a su repertorio.

Aunque el capitán de la Scaloneta, intentó en dos ocasiones marcas desde la esquina del campo de juego, el arquero neerlandés Maarten Paes evitó un golazo en dos oportunidades.