El Gobierno de Santa Fe realiza obras en diferentes localidades del departamento La Capital para disminuir el riesgo hídrico ante la inminente llegada de una crecida del río Paraná, entre ellas en la localidad de Arroyo Leyes para proteger a 120 familias que residen en la costa, informaron hoy voceros oficiales.

El secretario de Recursos Hídricos de la provincia, Roberto Gioria, explicó que se trabaja en diversos frentes, con acopio de suelo, limpieza de canales y desobstrucción de desagües urbanos en Santa Fe, San José del Rincón y Arroyo Leyes.

"En Arroyo Leyes estamos reconformando y alteando el terraplén de defensa de barrio Villa Juana, con el objetivo de proteger a unas 120 familias, como también lo hicimos en San José del Rincón a la altura del kilómetro 10", precisó el funcionario.

Se trata de acciones en respuesta "a los pedidos de los municipios y comunas del departamento La Capital", con trabajos complementarios "a la obra que se está ejecutando a través de una contratista, de mantenimiento de las defensas del Gran Santa Fe".

"En Santa Fe estamos trabajando en la limpieza del Canal Roca, luego continuaremos con el Canal Monseñor Rodríguez y el Canal Lateral del Mercado. La limpieza de esos tres canales es lo que nos pidió la municipalidad local y lo estamos haciendo con maquinaria de la provincia", explicó Gioria.

Asimismo, el funcionario indicó que también se prevén trabajos de mantenimiento y limpieza en Alto Verde, Colastiné y en Santo Tomé y aclaró que cada localidad tiene desarrollado y llevará adelante sus planes de contingencia y de evacuación cuando lo consideren pertinente.

Esas acciones son competencia de cada municipio o comuna, en tanto el Gobierno provincial, a través de Protección Civil, asistirá a cada jurisdicción "en base a sus necesidades".

Por su parte, la Dirección Provincial de Vialidad desarrolla tareas de limpieza y desobstrucción de desagües pluviales en diferentes tramos de la ruta provincial 1, que se extiende por los departamentos La Capital, Garay, San Javier y General Obligado, para que el agua proveniente de las precipitaciones se desagote sin provocar dificultades ni anegamientos.