Desde este sábado rige en Santa Fe la nueva ordenanza por nocturnidad. Se trata de una norma amplia, que busca dar solución a diferentes conflictos arrastrados “desde hace seis o siete años en la ciudad y que la pandemia profundizó".

La cita pertenece a Matías Schmuth, secretario de Producción y Desarrollo del Ejecutivo local. Desde su punto de vista, la efectividad del nuevo esquema dependerá de “un conjunto de cosas que deberán evaluarse: ver de qué modo baja el grado de conflictividad entre los vecinos y los establecimientos que realizan actividades de este tipo, además de ver cómo el sector puede ir creciendo de una forma más ordenada y acorde a las zonas donde se realizan”.

Es que de acuerdo a la nueva ordenanza, la gestión urbana de la nocturnidad debe conciliar “la convivencia entre el ocio y el descanso, el consumo responsable, la fiscalización y la seguridad vial, el funcionamiento de los locales y sus distintas actividades, la regulación de sus horarios y el uso del espacio público”.

“Muchas actividades crecieron en nuevos barrios y buscamos con la norma que puedan crecer pero de manera ordenada y respetando el entorno, y por eso pretendemos que la Ordenanza regule el esparcimiento por los próximos 10 o 15 años, donde se pueda motivar al sector empresario para que siga invirtiendo en el rubro, con reglas claras y parámetros de convivencia”, explicó Schmuth a Santa Fe Plus.

El optimismo del Palacio Municipal contrasta, no obstante, con las expectativas de los empresarios del sector. Tal es el caso de Adrián Ramseyer, presidente de Villa Dora, quien mostró su preocupación ante “la incertidumbre" por la posibilidad de perder horas de baile y resentir su tradicional servicio de domingo.

Se explica: “Nos quitan dos horas de baile de nuestro servicio más tradicional. Intentaremos readecuarnos, y si no funciona nos pasaremos a los sábados, tanto para mantener las cuatro horas del baile como para poder solventar los gastos fijos, que son muy grandes. Sin el baile, para nosotros es imposible."

Por todo ello, Ramseyer señaló tener “expectativa cero y cien por ciento de incertidumbre porque no sabemos qué va a pasar, tenemos miedo de que la gente no se acostumbre a los nuevos horarios. Los demás requerimientos no nos importan, porque Villa Dora tiene todo en orden.”

Aún más crítico Jorge Raúl Reynoso, dueño del complejo Piramide, lamentó la “desprotección” que supone tanto la nueva Ordenanza como las medidas tomadas durante las gestiones de los exintendentes Mario Barletta y José Corral. En tal sentido, comentó: “Hicimos un emprendimiento millonario que el Municipio no acompañó. La anterior Ordenanza hizo cerrar locales que estaban en el centro, evaluando los mismos ítems que se plantean hoy. Pero no funcionó, porque no terminaron siquiera el proyecto: no hicieron senderos, no pusieron seguridad ni micros. Por el contrario, hicieron todo para que no se cumpla.”

“La gestión de Corral y Barletta terminó en algo hecho a la fuerza y no brindaron una alternativa útil. La nueva gestión tiró todo por la borda y se fundieron 12 personas que perdieron todos sus ingresos. Pero no les importa”, completó al respecto.

Consultado sobre la nueva normativa, señaló que “quizá va a ser más interesante para el consumidor, pero no para el ciudadano que tiene su vivienda o la gente que quiere vivir por fuera de la nocturnidad."

Y amplió: "Pero más allá de lo que nos guste o no, hay un hecho ineludible: invertimos en base a una Ordenanza que era el contrato entre el Municipio y los empresarios. El Municipio cambió el contrato, por lo que incursionó en una falta muy grave."

"¿Qué nos queda?¿Hacerle un juicio al Estado? Es luchar contra molinos de viento y sentimos una tristeza enorme. Nada de lo que repiensen puede enmendar el daño hecho. La inoperancia de la conducción política es explícita en todos los órdenes. Después de años para los que invertimos y no pudimos funcionar, dicen que van a permitir otras cosas. No van a indemnizarnos a los damnificados y el lugar está prácticamente ocioso", cerró Reynoso.

Las nuevas reglas de la noche

En rigor, la Ordenanza propone “un marco normativo para la habilitación y el funcionamiento de actividades de esparcimiento y ocio nocturno, que contemple horarios de funcionamiento, condiciones de seguridad e higiene y estándares de protección contra la contaminación acústica de modo de promover la realización de esas actividades económicas de conformidad a pautas de convivencia ciudadana”.

En tal marco, los principales cambios de horarios que rigen desde este sábado son:

Paradores de playa

  • Domingos a jueves de 9 a 24 horas
  • Viernes, sábados y feriados de 9 a 2 de la mañana del día siguiente

Espacios culturales

  • Miércoles y domingos hasta las 2.30
  • Jueves, viernes, sábados y vísperas de feriados hasta las 3

Actividad gastronómica

  • Lunes, martes, miércoles y domingos hasta las 2.30
  • Jueves, viernes, sábados y vísperas de feriados hasta las 3

Patios abiertos y espacio público

  • Domingos a jueves hasta las 1.30
  • Viernes, sábados y vísperas de feriados hasta las 3

Bares, restaurantes y afines

a) Instalaciones interiores cerradas

  • Domingos a miércoles hasta las 2.30
  • Jueves, viernes, sábados y vísperas de feriados hasta las 4.30

b) Patios abiertos y espacio público

  • Domingos a miércoles hasta las 1.30
  • Jueves, viernes, sábados y vísperas de feriados hasta las 3

Discotecas

  • Jueves, viernes, sábados y vísperas de feriados hasta las 6

En este punto, se establece además un “plan de recuperación y puesta en valor del entorno de la Ruta 168”, que incluye: colocación y refacción de luminaria; cartelería y señalética; tareas de limpieza y desmalezamiento; reparación de calzada y demarcación; incorporación de estacionamiento con identificación de dársenas; y movilidad para la zona.

“Crecer de manera ordenada y respetando el entorno”

Entrevista con Matías Schmuth, secretario de Producción y Desarrollo de la ciudad de Santa Fe

¿Qué objetivos se plantearon para medir la efectividad de la Ordenanza que entra en vigencia?

Pretendemos que la Ordenanza regule el esparcimiento por los próximos 10 o 15 años. Que pueda motivar al sector empresario para seguir invirtiendo en el rubro, estableciendo reglas claras y parámetros de convivencia.

Son un conjunto de cosas que deben evaluarse: ver de qué modo baja el grado de conflictividad entre los vecinos y los establecimientos que realizan actividades de este tipo, además de ver cómo el sector puede ir creciendo de una forma más ordenada y acorde a las zonas donde se realizan. Esto, porque muchas actividades crecieron en nuevos barrios y buscamos que puedan crecer pero de manera ordenada y respetando el entorno.

También hay zonas y actividades que se presentan como más conflictivas y complejas, que requieren de mayor atención: no es lo mismo un boliche al que pueden ir cientos o miles de personas, que una cafetería o bar con aforo de 50.

—¿Por qué era tan importante contar con una nueva norma?

Era necesario porque la anterior norma fue sacada en un contexto de emergencia y pensada para un determinado período de tiempo. Había muchos conflictos, principalmente después de la pandemia, donde se agudizó una problemática que ya llevaba unos siete años por el crecimiento de los locales gastronómicos y los paradores. También es preciso mejorar el vínculo de clubes históricos como Villa Dora o República del Oeste, en relación a sus vecinos.

La anterior norma no daba herramientas para brindar las soluciones actuales planteadas por empresarios y vecinos. Por ejemplo, no era posible actuar sobre la regulación del horario de apertura y cierre de los locales, así como en las inversiones necesarias en materia acústica para que puedan mantener abierto hasta más tarde. En este sentido se enfocó el mensaje del Ejecutivo municipal. Luego en el Concejo se agregaron detalles interesantes como el estudio del impacto acústico, la higiene de los entornos y la posibilidad de volver a la figura de los pubs.

Era necesario adaptar la norma a los tiempos que corren.

—¿Cómo viene siendo el diálogo con los clubes barriales?

Venimos charlando semanalmente. Van a tener que hacer una adecuación de horarios. Villa Dora tiene dos horarios de cierre, de “verano” e “invierno”, adecuaciones que venimos charlando y que van a llevar al cumplimiento.

—¿Se llevaron alguna conclusión del debate público en el Concejo? ¿Les gustaría que se repita ese modelo para Movilidad?

Fue una manera muy demócratica de dar un debate muy importante para la ciudad. También es importante señalar que previamente a enviar el mensaje, desde el Municipio hicimos encuestas y encaramos todo un proceso de trabajo que llevó un año, donde escuchamos muchas voces que enriquecieron el proyecto.

Es un proceso que está bueno y es muy democrático, porque permite que todos puedan tener su espacio para poder expresarse. Sería interesante que a futuro pueda repetirse para cualquier tema que implique tal grado de análisis.

La oposición pide reglamentación

Consultados sobre las expectativas sobre la puesta en funcionamiento de la Ordenanza, la concejala Adriana Molina, de Juntos por el Cambio, único bloque que votó en contra de la norma, señaló: “Esta semana mandamos una nota al intendente (Emilio Jatón) para que mande la reglamentación a los sectores afectados, ya que la Ordenanza fue aprobado a fines de noviembre y ya debería haberse hecho. Pero aún no fue remitida y genera una absoluta desprotección y desinformación para quienes necesitan tomar decisiones.”

Y agregó: “Estamos hablando de una medida que deja librado el rubro a la discrecionalidad, sin reglas claras y que no aporta ningún tipo de transparencia. Justamente, los ejes que más se exigieron durante las audiencias públicas.”

“No obstante, entendemos que el hecho de que se remita una reglamentación no llevará a una mayor transparencia, y por eso nos abstuvimos. Lamentablemente debemos decir que tuvimos razón en no votarla. No va a tener buenos resultados”, completó la edil cambiemita.