El Ministerio de Salud informó que, este lunes 8 de noviembre, se enviaron 27.196 turnos para vacunación, y sugiere a la población que revise las vìas de comunicación: los mensajes de texto, el correo electrónico y el portal de vacunación de la provincia. 

El operativo se centrará en La Esquina Encendida, donde se dieron un total de 2 mil turnos, desde las 8 y hasta las 16. Allí se estará colocando una tercera dosis de Astrazeneca a quienes recibieron dos de Sinopharm. Se trata de 1.899 mayores de 60, 85 de 18 a 59 años, 11 docentes y auxiliares, 4 personal de salud y una persona perteneciente a seguridad.

En tanto, en La Redonda  se otorgaron 1.416 turnos de 8 a 14 para inocular con segundas dosis de Sputnik a 9 mayores de 60 y 1.386 de 18 a 59 años, además de dos dosis para docentes y auxiliares, 6 para personal de salud y 13 para el personal de seguridad.

Sputnik V y Moderna

La provincia, a través del Ministerio de Salud, y en conjunto con el Centro de Tecnología en Salud Pública (CTSP) de la Facultad de Ciencias Bioquímicas y Farmacéuticas (FBIOyF) de la UNR, y el hospital Provincial del Centenario, realizaron una investigación que brindó importante evidencia local sobre los beneficios de aplicar esquemas combinados de vacunas contra el Coronavirus. Ana Laura Cavatorta, investigadora responsable del estudio, destacó que “combinar este tipo de tecnologías (adenovirus con ARNm) es muy eficiente, incluso más que si se utilizan en ambas inoculaciones dosis de la misma tecnología (de una misma vacuna)”.

“De la totalidad de los voluntarios, el 65 por ciento fueron mujeres y el 35 varones, entre los cuales el 67 por ciento era mayor a 60 años; y la edad fue un aspecto clave”, precisó la también investigadora del CONICET, docente de Virología, responsable científica del CTSP de la FBIOyF. En general, los mayores de 60 años comienzan a transitar lo que se denomina “inmunosenescencia”. “Se produce en ellos un déficit fisiológico de la respuesta inmune y se convierte de ese modo en grupo de riesgo para determinadas enfermedades, incluyendo al Covid-19”, explicó Ana Laura Cavatorta.

Otra conclusión es que cuando se aplica la segunda dosis de una misma vacuna opera como un ‘refuerzo’ de la anterior. “Lógicamente, al aplicar una vacuna distinta, y no ya un refuerzo de lo mismo, el sistema inmune vuelve a ‘verlo’ como extraño; y se potencia mucho más la respuesta, porque es como si se generara desde cero”, ilustró la responsable de la investigación.

Importante fue también observar qué pasó con aquellos voluntarios que ya habían tenido Covid-19. “No hubo cambios significativos. Quienes tuvieron la enfermedad, no importa qué tipo de vacuna reciban. Ya con una primera dosis tienen niveles altos de anticuerpos, generando lo que llamamos ‘inmunidad híbrida’. A la inmunidad natural que les provocó el SARS-CoV-2 se les asoció la artificial proporcionada por la Sputnik V”, explicó Cavatorta.

“Es decir –concluyó la investigadora– que se generó en ellos una memoria inmunológica natural ya muy buena. Entonces no encontramos diferencias entre aplicar esquemas homólogos de heterólogos en personas que tuvieron Covid-19. Sí observamos la importancia de combinar vacunas, fundamentalmente en adultos, como ya dijimos”, amplió Cavatorta.