Una de las pruebas que los fiscales Valeria Haurigot, Franco Carbone y Gastón Ávila presentaron contra la organización detrás de balaceras extorsivas a estaciones de servicio y escuelas es una llamativa conversación telefónica captada a partir de la intervención judicial de las líneas bajo sospecha.

De un lado habla Nelson "Pandu" Aguirre, un delincuente que pisaba firme en Villa Banana pero que está preso en la Unidad Penitenciaria de Coronda y estaría vinculado a Ariel "El Viejo" Cantero, a las órdenes para activar un sistema de recaudación de cobros extorsivos a comerciantes, a cambio de permitirles trabajar sin riesgo a sufrir robos o hechos violentos. Del otro lado de la línea habla Nazareno "Anteojito" Gauna, quien está imputado como un autor material de algunas de las balaceras investigadas. En concreto, los atentados a balazos de noviembre de 2021 contra las estaciones de servicio de San Martín y Saavedra, y Lagos al 4900; y contra las escuelas de Cafferata al 4000 y de Magnano al 6300. 

Lo que sigue es el audio y la transcripción de esa charla. Definen los ataques por hacerse y el cobro por los que ya se hicieron. Quien debe pagar es la ex pareja de Cantero, Patricia Celestina Contreras, según se desprende del audio.

Gauna: —En qué andás Tigre?

Aguirre: —Me escuchás, puto?

—Decime amigo. Ya estoy yendo para allá. No estoy ni... cómo es?... estoy escuchando el audio como diez veces.

—Escuchá, me escuchás?

—Sí. 

—Ahí la señora te va a dar una moneda. Me escuchás?

—Cuánto me va a dar la señora?

—Te va a dar una moneda, y cuando hagamos lo de las escuelas te va a dar otro. 

—Me va a pagar lo que ya hicimos?

—Sí, después te va a pagar lo otro, lo de la escuela.

—Listo.

—Escuchá, igualmente amigo, no, no cobres mucho, porque te voy a decir una cosa. Me escuchás?

—Sí

—El Ariel me dio semáforo verde para que cobremos todos los negocios a nombre de él. Todos. Todos los negocios. Vamos y vamos. Negocio que no sea del Ariel, negocio que tiene que pagar.

—Sí. Me gusta.

—Vamos y vamos iguales. Todos iguales, todos los negocios. Donde veas un negocio y dicen que es de él, bajá, preguntá para quien están laburando, para Fulano, bueno, pará que llamo. Me dijo que él tiene tu número. ¿Puede ser?

—Sí, se lo dejé, pero nunca me mandó un mensaje, nada. Sí, se lo dejé al Viejo.

—En este momento él está en la casa. Andá a hablar con él, que tiene un montón de trabajo para hacer, para hacer cobranza, todo cobranza.

—Bueno, escuchá. Si él está en la casa le digo que me señale la casa de la gorda Ruth.

—Bueno, ahí está. Pasá por ahí... escuchá...

—Qué?

—Bueno, escuchá lo que te digo, escuchá bien: todo negocio que no sea de Ariel, si no trabajan con nosotros, no pagan la zona. Vos le vendés la mercadería y le cobran la zona a la Ruth. ¿Está?

—Listo.

—Agarramos plata de todos lados.

—Te dio la re cabida, boludo.

—Qué?

—La re cabida te dio

—Bueno, escuchá, a Marquitos lo van a correr, ¿Sabés quién es el Ñato?

—Al único ñato que conozco no debe ser, es re gil y es de Tablada. 

— ¿Podés pasar ahora por la casa del Ariel?

—Estoy acá, Uriburu y Avellaneda.

—Pasá por ahí.

—Listo.

—Bueno y hablá bien, decile del coso, mirá que nos dieron semáforo verde para todo, pero vamos a hacer las cosas bien, dale prolijo y vamos a cuidarlo.

—Sí, sí, olvidate.

—Mirá que me dieron el poder de todos lados... 

—Bueno, todo todo. Cobran todo. Tienen que pagar todo.

—Todos tienen que pagar, todo.

—Ahí, en la canchita preguntale a todos los que están laburando, para quién, a todos. Todos tienen que pagar. Ahí en la canchita, en todos lados. ¿Me escuchás?

—Sí.

—Decile que te diga bien quiénes son todos, todos los que a él le pagan y los que no le pagan van a pagar.

—Listo.

—Me dio la cabida para que cobremos toda la zona, y vamos y vamos, pero con el nombre de él.

—Vamos.

—Pasá ahora por hablar por ahí.

—Estoy a dos cuadras.

—Y hablá por la casa del loco, que ahí te mandé el mensaje.

—Dale.

—No le cobrés mucho, no exageres, que tenemos cabida. Vamos a ganar plata a dos pesos amigo.

—Medio palo no está bien?

—Por qué?

—Por esas dos cosas, por la que hicimos, lo que falta es aparte.

—No, cobrale un poquito menos, Naza, ¿me escuchás?

—Se

—Cobrale un poquito menos porque nos están dando la cabida de todo, cumpa.

—Bueno, cuatrocientos.

—Ahí yo lo agarro, si lo llamo le digo que te den coso, hacé lo de la escuela, puto.

—Quedate tranquilo que yo ya manoteé, estaba por ir hoy a la escuela.

—Cuando hagas lo de la escuela avisame, así yo mando otros pibes también, así ustedes hacen una escuela y los otros hacen otra escuela.

—Sí.

—Avisame así activo dos escuelas juntas. Dejen una notita que si se vota mañana vamos a dejar uno muerto.

—Acá tenés la casa del Viejo.

—Hablá bien con él y todo.

—Qué es lo que querés que le diga bien, tigre?

—Decile que te diga bien porque me dijo que vamos a cobrar toda la zona. 

(entabla conversación con una tercera persona que está en el domicilio que su interlocutor fue a visitar para ver a Ariel Cantero: - (Pelo duro, ahí esta el antiojito, ahí afuera, le explicas bien a él así arrancan ahora, así arrancan ahora bien tempranito, hacer las cobranzas, todo lo que tenes que cobrar. quedate tranquilo que te van cobrar)

Hay un bache con conversaciones con terceros de otros temas

—¿Te atendió?

—No

—Golpeale fuerte puto porque esta atrás en el patio 

—Ahí está, lo fue a llamar una chica. de parte de anteojito tigre...listo... ahí viene el viejo

—bueno te dejo que hables tranquilo. llamame apenas terminas. y anda para la casa de la Cele

—(...) ahí viene el viejo. ¿querés que te pase a vos?

—No no. Hablá tranquilo, hablá tranquilo con él

—Listo amigo

—Habla bien, bien, bien, como tenés que hablar

—Dale nos vemos tigre

DESCARGAS