Un médico flebólogo de la ciudad santafesina de Reconquista, de 44 años, fue condenado a 17 años de prisión e inhabilitado de por vida para ejercer la medicina tras ser hallado culpable del abuso sexual de al menos seis pacientes, informaron hoy voceros judiciales.

Se trata de Pablo Antonio Gazze, de 44 años, quien fue condenado por los jueces Norma Senn, Gonzalo Basualdo y Martín Gauna Chapero, en el arco de un juicio oral que se llevó a cabo en los Tribunales de Reconquista, ciudad situada 320 kilómetros al norte de la capital de la provincia.

El fiscal Juan Sebastián Marichal, que llevó a cabo la investigación y representó al Ministerio Público de la Acusación (MPA) indicó que “Gazze fue condenado por seis hechos de abuso sexual, uno en perjuicio de cada una de las víctimas que comparecieron al juicio oral”. 

Aclaró que “en uno de los casos, la conducta ilícita se calificó como abuso sexual con acceso carnal y en los otros cinco como abuso sexual  gravemente ultrajante”.

Marichal añadió que aguardará "los fundamentos del fallo para saber por qué los magistrados resolvieron como lo hicieron y evaluar la posibilidad de
apelar”. Los hechos ilícitos fueron cometidos entre mayo de 2014 y diciembre de 2019 en un consultorio de Reconquista en el que el condenado  trabajaba.
"Los magistrados entendieron que hay pruebas suficientes de que Gazze vulneró la integridad sexual de seis mujeres con las que se había comprometido a realizarles un tratamiento médico vinculado a problemas de várices”, expresó el fiscal. 
En ese sentido, afirmó que “abusó de las víctimas luego de aplicarles inyecciones en las piernas, en el marco de sesiones de escleroterapia”.

Gazze fue condenado como autor de los delitos de abuso sexual con acceso carnal en perjuicio de una víctima y de abuso sexual gravemente ultrajante
hacia las otras cinco.

En relación al abuso sexual con acceso carnal, el tribunal desestimó el agravante del daño grave a la salud que había sido solicitada por la Fiscalía.
Por otro lado, el flebólogo fue absuelto por otros dos hechos ilícitos que se le habían atribuido en contra de dos de las seis víctimas, y por el abuso de una séptima mujer que decidió no participar del juicio.