Una vez más se realizó un decomiso de gran cantidad de mercadería en la ciudad de Santa Fe. En esta oportunidad, la Secretaría de Control Municipal interceptó a al menos dos vehículos que circulaban por Avenida Gorriti y San José -a la altura del Jardín Botánico- con más de 800 kilos de lácteos y pastas frescas. 

En los vehículos había yogures, tapas de taras y empanadas, fideos, ravioles, distintos tipos de leche y mercadería de panadería. Según indicó el personal municipal y policial, en uno de ellos no estaban garantizadas las condiciones de frío necesarias, ya que no funcionaba la refrigeración. El otro no contaba con las autorizaciones para trasladar este tipo de alimentos.

Operativos anteriores

El viernes pasado la Municipalidad llevó adelante el tercer operativo similar. Decomisó carne en mal estado de una carnicería de barrio Roma, ubicada en las calles Salta y San José. Había carne, achuras, pollo, huevos y ensaladas no aptas para el consumo. 

El operativo partió de una denuncia realizada a la Oficina de Atención Ciudadana. Según el ente municipal, el lugar no cumplúa con las condiciones de higiene y los alimentos estaban en mal estado. Toda la mercadería fue trasladada en una camioneta de la Guardia de Seguridad hasta el relleno sanitario. El local fue clausurado y no puede vender mercadería.

Previamente, personal de la Secretaría de Control Municipal, junto a agentes de la Guardia de Seguridad Institucional y de la policía provincial, realizaron el jueves un operativo sobre un local comercial ubicado sobre Teniente Loza al 6300. Allí, y de acuerdo a los primeros trascendidos, los agentes se encontraron con alrededor de seis mil kilos de carne en mal estado, además de diversas irregularidades como la falta de control de frío sobre dichos alimentos.

En total, la GSI debió disponer de cuatro camionetas para llevarse toda la mercadería.  Fue el segundo decomiso de carne en menos de 48 horas, tras el camión detenido con 16 mil kilos de carne en mal estado y sin cuidar la cadena de frío.

Trabaja en el lugar el fiscal Andrés Marchi, quien deberá develar el circuito de la mercadería en cuestión. Por el momento, ordenó llevar lo incautado al relleno sanitario local.