Sin dudas, el cierre de listas camino a las elecciones primarias de Santa Fe dejó mucha tela que cortar. Una de las candidaturas definidas sobre el límite fue la de Alejandra Rodenas como primera diputada provincial del espacio Unidad Ciudadana que lleva como fórmula de gobernador y vice a Marcos Cleri y Alejandra Obeid dentro del frente Juntos Avancemos.

Durante el fin de semana circularon versiones que indicaban que la postulación de la vicegobernadora respondía a un enfrentamiento con su compañero de fórmula, el gobernador Omar Perotti. Incluso otro trascendido señalaba al senador Armando Traferri como el promotor de la postulación de Rodenas.

Pasado ya el vértigo del cierre, por estas horas la información más concreta es que la candidatura de la presidenta del Senado tiene un vínculo de alcance nacional que llega hasta la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y una construcción partidaria con la mira puesta en el futuro peronista en Santa Fe.

No es ninguna novedad esa relación que se ha ido construyendo desde 2017 a partir de las responsabilidades institucionales que Rodenas ejerció generando conexiones y relaciones con referentes del peronismo alineados con CFK como Wado de Pedro, Marcos Cleri, Axel Kicillof, Mayra Mendoza y Verónica Magario, entre otras y otros dirigentes.

Luego de no haber llegado a un acuerdo con Perotti para conformar una lista de diputados provinciales de manera conjunta –según dejaron trascender desde el entorno de Rodenas– la vicegobernadora recibió el llamado de Florencia Carignano, directora nacional de Migraciones, quien le ofreció el primer lugar en la boleta de Unidad Ciudadana, referenciada en la vicepresidenta de la nación.

La decisión se consolidó cuando la titular de la Cámara alta recibió una segunda llamada, esta vez de parte del ministro del Interior Wado de Pedro, quien por pedido de Cristina y con apoyo explícito de los referentes desde Buenos Aires le solicitó que encabece esta lista de precandidatos a diputados, tal como afirmó la misma fuente.

Se cosecha lo que se siembra

La relación de Rodenas con Cristina no se reduce a los contactos en común. La vice santafesina inició su militancia peronista en la universidad, es abogada e incluso en su trayectoria como jueza penal de la ciudad de Rosario ha puesto de manifiesto algunas críticas a cierto sector de la justicia que apela a una forma de ejercer la magistratura ligada con el disciplinamiento de la política. No es casualidad que así lo haya expresado en encuentros nacionales de derecho, foros y en sus propias redes sociales.

Rodenas demostró la misma coherencia en toda su carrera política. En 2017 fue electa diputada nacional por el Nuevo Espacio Santafesino que integraba el Frente Justicialista. Aquellos comicios de medio término durante la gestión de Mauricio Macri fueron su primera experiencia electoral tras renunciar a su cargo como jueza para trabajar en el Poder Legislativo siendo opositora al gobierno de Cambiemos.

Luego de dos años como diputada, fue electa vicegobernadora en 2019 junto a Perotti, ocupando un lugar estratégico en la fórmula para hacer contrapeso a sectores más conservadores del peronismo, logrando de esa manera el retorno al gobierno provincial luego de 12 años de hegemonía del Frente Progresista, hoy alineado con Juntos por el Cambio.

Sus allegados más próximos en la política destacan que en 2023, “el final de su mandato como vicegobernadora la encuentra participando de manera activa en la política provincial, alineada con los sectores peronistas kirchneristas y trabajando por el futuro del peronismo y de Santa Fe”.

En una PASO en la que se definirá como se irá conformando el tablero de la política provincial a partir del 10 de diciembre, no es poca cosa.