Las compañías distribuidoras de gas solicitaron este miércoles incrementos correspondientes a ese componente de un promedio del 200%, con un impacto en el valor final de las facturas de los usuarios residenciales a partir de febrero que oscila entre un 21% y el 77,5% en todo el país.

Por su parte, Néstor Molinari, en representación de Litoral Gas, solicitó incrementos con un impacto del 34,4% en un usuario residencial promedio (de $ 4.354 a $ 5.854) y del 43,4% para uno de Zona Fría (de $ 3.541 a $ 5.077) a partir del 1° de febrero. “Litoral Gas acumula significativos aumentos de costos de operación y de inversión por efectos de la inflación", señaló.

Y agregó: “Hay que sumar que a partir del esquema de segmentación energética y el traslado a la factura de los usuarios del aumento del precio de gas se han generado aumentos reales en los costos de la licenciataria que no tienen su origen en la inflación, sino por impacto en el gas natural no contabilizado en gastos directos tales como incobrables y comisiones de cobranzas”.

Los pedidos se formularon en el marco de la audiencia pública virtual convocada por el Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas). En tanto, la tarifa final del gas está integrada por cuatro componentes: el precio del gas en boca de pozo, el transporte, la distribución y la carga impositiva nacional, provincial y municipal.

Por tal razón, el impacto de los porcentajes propuestos por las distribuidoras en la factura que pagan los usuarios es variable, debido a que la proporción de ese componente en el costo total es diferente según la región de cobertura, con un promedio del 12%.