El fin de semana pasado, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, invitó a cualquier ciudadano extranjero a unirse a las fuerzas del país contra la invasión de Rusia a través de la recién creada Legión Internacional para la Defensa Territorial de Ucrania.

El Gobierno pidió a los interesados que contacten inmediatamente con las embajadas ucranianas, siguiendo el reglamento ucraniano sobre el Servicio Militar en las Fuerzas Armadas por parte de Extranjeros y Apátridas estipulado en 2016.

El canciller ucraniano, Dmytro Kuleba, afirmó hoy que más de 1.000 personas ya respondieron a la solicitud.

En un video en su cuenta de Facebook, Kuleba detalló que voluntarios de 16 países ya están llegando a Ucrania "listos para luchar contra el agresor" y "siguen llegando solicitudes".

La viceministra de Defensa de Ucrania, Hanna Maliar, aseguró esta semana que el Gobierno ya contaba con "varios miles" de peticiones de ciudadanos extranjeros para combatir en el país europeo.

Algunos Gobiernos, como el del Reino Unido, han dicho que apoyaban la iniciativa ucraniana y que respaldaban a los ciudadanos que quisieran ir a Ucrania a combatir.

Otros, en cambio, lo han considerado inconveniente.

Hoy, el Gobierno de Japón debió intervenir para desalentar a las decenas de personas que se habían registrados para ir a combatir a Ucrania en respuesta a una convocatoria hecha por la embajada ucraniana en Tokio.

"El Ministerio de Relaciones Exteriores difundió una orden por la cual pide a los connacionales no dirigirse a Ucrania por ningún motivo", dijo el jefe de Gabinete, Hirokazu Matsuno, en declaraciones a periodistas, informó la agencia de noticias japonesa Kyodo.

Unos 70 japoneses de entre 20 y 60 años, en su mayoría exmiembros de las Fuerzas de Autodefensa de Japón, habían respondido afirmativamente al tuit de la embajada ucraniana para combatir junto a las tropas de Kiev contra los invasores rusos.

Poco después de la desautorización de Japón, la embajada ucraniana borró el tuit y lo reemplazo por otro en el que pide la colaboración de voluntarios expertos en la coordinación de donaciones de medicinas y prevención de desastres, y en telecomunicaciones.

Según la ley japonesa, responder al reclutamiento extranjero puede ser considerado un preparativo de complot para declarar una guerra privada a un país extranjero.

Entretanto, la embajada ucraniana precisó que hasta el martes logró recoger casi 14 millones de dólares en donaciones de 60 personas de Japón.