El entramado delictivo por el que Esteban Alvarado está sentado en el banquillo de acusados junto a otras seis personas por asociación ilícita, homicidios y balaceras, comenzó a ventilarse esta mañana en el Centro de Justicia Penal. Tras algunas dificultades en el comienzo por problemas de conexión comenzó uno de los juicios más importantes del año en la provincia de Santa Fe.

Cuando se realizó la presentación y le consultaron por su ocupación Alvarado dijo ser "comerciante", tener instrucción primaria completa y vivir en calle Constitución y Ricchieri, ambas paralelas entre sí.

El tribunal compuesto por Alejandro Negroni, Patricia Bilotta y María Isabel Mas Varela dio la palabra al supuesto jefe narco quien dijo no haber tenido derecho a una defensa justo. En tanto, se suponía durante la mañana en el estrado que el acusado no iba a presentar declaración, sin embargo lo hizo por más de media hora.

Entre otras cosas, en su declaración, deslizó que fue participe en la planificación de intimidaciones a Marsili, una empleada de la Fiscalía, a quien le solicitó que aceptara sus disculpas ya que no buscaba balearle su domicilio, sino “dejarle una corona”. Asimismo, sobre otras acciones delictivas que pesan sobre él, sostuvo que se tratan de operaciones en su contra por parte de la política y la prensa. 

“Me pasaron por seis módulos penales distintos, No me permitieron poner un perito de parte cuando abrieron mi teléfono. Los fiscales tienen el poder. No hay más justicia”, reclamó y se vanaglorió: “No hay justicia con José Pérez, imagínense con Esteban Alvarado”

“Con amigos míos, había amistades no asociación ilícita. Para agosto de 2021, yo estaba charlando de un abreviado de 12 años con los fiscales. Estaban esperando que (Jorge) Baclini dijera que sí y en ese contexto lo matan a Argüelles. Y ahí dicen: "Fue Alvarado”, yo no estoy imputado por ese hecho, pero al parecer en este juicio ya estoy condenado, la prensa y la política lo hicieron, están pidiendo lo máximo”, explicó sobre su mirada en cuanto a su situación procesal.

Alvarado señaló que en ese contexto le pusieron una multa de 1950 millones de pesos, según él, la misma que a Lázaro Báez. “¿De dónde podría sacar esa plata si estoy preso?”, se preguntó y aseguró que “es todo falso y un invento” de los fiscales de Criminalidad Organizada Luis Schiappa y Matías Edery, encargados de exponer la acusación.

En ese sentido descartó que existan pruebas en su contra. Si se endilgó que desde el año 95 está vinculado al rubro automotor, por lo cual estuvo detenido, pero aseveró que en las propiedades que “dicen que tenía no encontraron ni un peso y tampoco un armas” cuando fueron allanadas.

“Tonto no soy y nunca tuve la intención de amedrentar a la fiscal o a la Justicia. Mi intención era desviar la investigación de (Lucio) Maldonado, por lo de Ortigala le pido perdón a la señora Marsili, - funcionaria del MPA que le balearon su casa- mi primera idea era dejarle una corona”, expuso.