La inversión en el segundo trimestre de este año creció 18,8% respecto del mismo periodo de 2021 y la participación de esa tasa en el Producto Bruto Interno (PBI) alcanzó a 22,3%, con lo cual consignó el mayor registro desde 1993, es decir, fue la más alta de los últimos 29 años, de acuerdo a un informe oficial.

El trabajo realizado por el Ministerio de Relaciones Exteriores remarcó además que la inversión en el segundo trimestre "estuvo muy por encima del 16,1% de cuarto trimestre de 2019 y de todo el período de la gestión anterior (19,2%), sin dólares diferenciales, sin pandemia y sin guerra".

La Cancillería subrayó que "la inversión ha sido un componente clave para explicar el crecimiento de los últimos dos años y un factor determinante para la recuperación del empleo tras los efectos de la pandemia".

En ese marco, destacó que en 2021 la economía logró recuperar los niveles de actividad y empleo perdidos producto del impacto de la pandemia de la Covid-19.

En América Latina sólo tres países recompusieron el empleo y lograron que su mercado de trabajo volviese a la situación prepandemia: Ecuador, Bolivia y Argentina.
 

La Cancillería subrayó que "la inversión ha sido un componente clave para explicar el crecimiento de los últimos dos años.
La Cancillería subrayó que "la inversión ha sido un componente clave para explicar el crecimiento de los últimos dos años.


En la Argentina, el PBI trepó 10,4% luego de tres años consecutivos en baja, en 2018 y en 2019 por impacto de la crisis de balanza de pagos y en 2020 por la pandemia.

Durante el primer semestre de 2022 la tasa de crecimiento fue de 6,5% interanual y se espera que finalice el año por encima del 4%.

De esa manera, la economía argentina tendría dos años consecutivos de crecimiento del PBI, fenómeno que no ocurría desde 2010-2011.

En 2023, por su parte, las proyecciones indican un crecimiento en torno del 2% o 3%, con lo que habría que remontarse al periodo 2006-2008 para encontrar tres años consecutivos de expansión económica.

"La inversión ha sido el principal dinamizador del PBI durante los últimos dos años", indicó el análisis de Cancillería, que precisó que "en 2021 creció 33,4% -la primera suba luego de tres años de caída- y explicó 5,6 puntos porcentuales del crecimiento del PBI".

Con esta dinámica, la tasa de inversión cerró 2021 en 20,1% del PBI, muy por encima de los registros de 2019 (17,2%) y por arriba del promedio observado en todo el período 2016-2019 (19,2%), y este año continuó aumentando.

Las inversiones en la industria del Litio ayudaron al crecimiento del PBI.
Las inversiones en la industria del Litio ayudaron al crecimiento del PBI.


"La inversión es producto de la demanda y del crecimiento. Lo mismo ocurre con el empleo. No se trata de que lluevan inversiones y tampoco de desregular el mercado de trabajo para empeorar la situación de las y los trabajadores. Hay que fortalecer el mercado interno, tener una política industrial y científico-tecnológica definida y sostenida en el tiempo y mejorar la participación de los salarios en el ingreso, justamente para fortalecer la demanda y, a través de ella, el mercado interno", puntualizó Cancillería.

Además, puso de relieve que "la inversión en la Argentina tuvo una dinámica muy superior a la de otros países de la región", y afirmó que "aun cuando la tasa es mayor en algunas de esas economías, la recuperación observada en el caso argentino es notable".

En lo que va del año hubo anuncios de inversiones por un total US$ 27.857 millones, entre los cuales se destacan los de la australiana Fortescue Metal Groups, de US$ 8.400 millones en Sierra Grande, Río Negro, para producir hidrógeno verde; y del consorcio de empresas liderado por la firma canadiense Daymak e integrado además por FDC Sport, Magri Desing Consulting y Emerx, de US$ 8.300 millones para producir vehículos eléctricos en Córdoba.

También están los desembolsos que realizarán la minera coreana Posco, por US$ 4.000 millones en un proyecto de litio en Salta; de YPF, por US$ 3.410 millones en energías renovables; de fondos de desarrollo de Emiratos Árabes, por US$ 1.000 millones en infraestructura; de Pampa Energía, por US$ 800 millones en el yacimiento neuquino de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta; y de Equinor, por US$ 800 millones en exploración hidrocarburífera costa afuera en Mar del Plata.

A estos se suman los de la estadounidense MMEX Resources Corp, por US$ 500 millones en energías renovables en Tierra del Fuego; la petrolera Wintershall Energia, por US$ 385 millones, también en exploración en Mar del Plata; Mirgor, por US$ 210 millones en un puerto en la ciudad fueguina de Río Grande; y Whirlpool, por US$ 52 millones para producir lavarropas en la localidad bonaerense de Pilar.

(Fuente: Télam)